Se han convertido en un gran aliado para cubrir espacios exteriores, como terrazas, balcones, patios, áreas de circulación, fachadas, etc. Se fabrican en estructuras metálicas o de madera, con soportes verticales y vigas longitudinales, cruzadas por vigas transversales, que se entrelazan para proteger diferentes áreas.

Tienen muchos usos como brindar sombra y protección de la lluvia. Igualmente preserva espacios interiores de las inclemencias del sol o del invierno. Crean espacios reservados en jardines o terrazas, con la finalidad de ampliación de áreas sociales y de esparcimiento.